Abordar la escalabilidad de bitcoin no es fácil, pero los desarrolladores Thaddeus Dryja y Joseph Poon tuvieron una idea. En un documento técnico de 2016, propusieron el concepto de un protocolo llamado “la red relámpago” que permitiría transacciones más rápidas y económicas sin tener que cambiar el tamaño del bloque.
La red crea una segunda capa en la parte superior de la cadena de bloques de bitcoin y comprende canales generados por el usuario. Puede enviar pagos de forma segura de un lado a otro sin la necesidad de confiar o incluso conocer a su contraparte.
Digamos, por ejemplo, que quería pagarte por cada minuto de video que veía. Abríamos un canal relámpago y, a medida que pasaban los minutos, se realizaban pagos periódicos de mi billetera a la suya. Cuando termine de ver, cerraríamos el canal para liquidar el monto neto en la cadena de bloques de bitcoin.
Debido a que las transacciones son solo entre tú y yo y no es necesario transmitirlas a toda la red, son casi instantáneas. Y debido a que no hay mineros que necesiten incentivos, las tarifas de transacción son bajas o incluso inexistentes.
Cómo funciona
Primero, dos partes que desean realizar transacciones entre sí configuran una billetera de múltiples firmas (que requiere más de una firma para realizar una transacción). Esta billetera tiene una cierta cantidad de bitcoins. Luego, la dirección de la billetera se guarda en la cadena de bloques de bitcoin. Esto configura el canal de pago.
Las dos partes ahora pueden realizar un número ilimitado de transacciones sin tocar la información almacenada en la cadena de bloques. Con cada transacción, ambas partes firman un balance general actualizado para reflejar siempre la cantidad de bitcoin almacenada en la billetera que pertenece a cada una.
Una vez que las dos partes terminan de realizar transacciones y cierran el canal, el saldo resultante se registra en la cadena de bloques. En caso de disputa, ambas partes pueden usar el balance general firmado más recientemente para recuperar su parte de la billetera.
No es necesario configurar un canal directo para realizar transacciones en forma relámpago; puede enviar pagos a alguien a través de canales con personas con las que está conectado. La red encuentra automáticamente la ruta más corta.
El desarrollo de la tecnología recibió un impulso significativo con la adopción de SegWit en las redes bitcoin y litecoin. Sin la solución de maleabilidad de la transacción de la actualización, las transacciones en la red Lightning habrían sido demasiado riesgosas para ser prácticas.
Sin la seguridad de la cadena de bloques detrás de ella, la red Lightning no será tan segura, lo que implica que se utilizará en gran medida para transacciones pequeñas o incluso micro que conllevan un riesgo menor. Es más probable que las transferencias más grandes que requieren seguridad descentralizada se realicen en la capa original.
¿Dónde estamos ahora?
En marzo de 2018, la startup de California Lightning Labs anunció el lanzamiento de una versión beta de su software, poniendo a disposición lo que los inversores y los líderes del proyecto dicen que es la primera versión de la tecnología completamente probada hasta la fecha. Sin embargo, todavía es temprano: el tamaño de las transacciones es limitado y el lanzamiento está dirigido a desarrolladores y “usuarios avanzados”.
Investigaciones recientes sobre la red de rayos muestran signos de una mayor vulnerabilidad debido a la centralización de varios nodos en la red que controlan la mayoría de los fondos. Los desarrolladores exploran continuamente nuevas posibilidades para mejorar la privacidad y la eficiencia del rayo, así como formas de incorporar otras tecnologías como Schnorr a la red. No hay duda de que pasará algún tiempo antes de que estas actualizaciones de todo el sistema puedan tener lugar con éxito.