Contenido
- ¿Qué es la Web 3.0?
- Una breve historia de la evolución de Internet
- Web 1.0
- Web 2.0
- El futuro
- ¿Qué hace superior a la Web 3.0 respecto a sus predecesoras?
- Conclusión
¿Qué es la Web 3.0?
Internet ha cambiado dramáticamente desde su concepción. Del Internet Relay Chat (IRC) a las redes sociales modernas, se ha convertido en una parte vital de las interacciones humanas -y continúa evolucionando.
La Web 3.0 es la próxima generación de tecnología de Internet, que se apoya de una forma profunda en el aprendizaje automatizado (machine learning) y la inteligencia artificial (AI). Su objetivo es crear páginas y aplicaciones web más abiertas, conectadas e inteligentes, orientadas al uso de una comprensión automatizada de los datos.
Mediante el uso de AI y técnicas avanzadas de aprendizaje automatizado, la Web 3.0 se propone proporcionar una información más personalizada y relevante a un ritmo más rápido. Esto puede lograrse mediante el uso de algoritmos de búsqueda más inteligentes y el desarrollo del análisis de Big Data.
Las páginas web actuales presentan, normalmente, información estática o contenido dirigido por los usuarios -como por ejemplo foros o redes sociales. A pesar de que esto permite que la información sea publicada en el seno de un amplio grupo de personas, puede no satisfacer las necesidades de un usuario específico. Una página web debería poder adaptar la información que proporciona a cada usuario individual, de forma similar al dinamismo de las comunicaciones humanas en el mundo real.
El científico de la computación Tim Berners-Lee, inventor de la World Wide Web, explicó esta idea sobre una Web Semántica en 1999:
Tengo el sueño de una Web [en la que los ordenadores] lleguen a ser capaces de analizar todos sus datos -el contenido, los enlaces y las transacciones entre personas y computadoras. Una “Web Semántica” que haga esto posible aún debe aparecer, pero cuando lo haga, los mecanismos diarios del comercio, la burocracia y nuestras vidas cotidianas serán gestionados por máquinas hablando con máquinas.
En la Web 3.0, un océano de información estará a disposición de páginas web y aplicaciones, que serán capaces de entender y utilizar los datos de una forma significativa para el usuario individual.
Una breve historia de la evolución de Internet
Las páginas y aplicaciones web han cambiado de una forma dramática a lo largo de las últimas décadas. Han evolucionado desde sitios estáticos a páginas “data-driven” (impulsadas por datos) que permiten a los usuarios interactuar y generar cambios.
Web 1.0
El Internet original se basaba en lo que conocemos como Web 1.0. El término fue acuñado en 1999 por el autor y diseñador de webs Darci DiNucci, cuando distinguió entre Web 1.0 y Web 2.0. A principios de la década de 1990, los sitios web se creaban utilizando páginas HTML estáticas que sólo tenían la capacidad de mostrar información -no había manera de que los usuarios cambiaran los datos.
Web 2.0
Todo esto cambió a finales de la década de 1990, cuando la transición hacia un Internet más interactivo empezó a tomar forma. Con la Web 2.0, los usuarios eran capaces de interactuar con páginas web a través de bases de datos, procesamiento del lado del servidor, formularios y redes sociales.
Esto produjo un cambio de una web estática a una web más dinámica. La Web 2.0 trajo un mayor énfasis en el contenido generado por el usuario y la interoperabilidad entre diferentes sitios y aplicaciones. La Web 2.0 tenía menos que ver con la observación y más con la participación. A mediados de la década de 2000, la mayoría de los sitios web hicieron la transición a Web 2.0.
El futuro
Al mirar la historia de Internet, la evolución de una web más semánticamente inteligente tiene sentido. Los datos se presentaron primero de forma estática a los usuarios. Entonces los usuarios podrían interactuar con esos datos dinámicamente. Ahora, todos esos datos serán utilizados por algoritmos para mejorar la experiencia del usuario y hacer que la Web sea más personalizada y familiar.
La Web 3.0, aunque no está completamente definida, podría aprovechar las tecnologías peer-to-peer (P2P) como blockchain, software de código abierto, realidad virtual, Internet de las cosas (IoT) y más.
Actualmente, muchas aplicaciones están limitadas a ejecutarse solo en un sistema operativo. Web 3.0 podría permitir que las aplicaciones sean más independientes del dispositivo, lo que significa que podrían ejecutarse en muchos tipos diferentes de hardware y software sin ningún costo adicional de desarrollo.
La Web 3.0 también tiene como objetivo hacer que Internet sea más abierto y descentralizado. En el marco actual, los usuarios deben confiar en los proveedores de redes y celulares que vigilan la información que pasa por sus sistemas. Con el advenimiento de las tecnologías ledger distributed, eso pronto podría cambiar, y los usuarios podrían recuperar la propiedad de sus datos.
¿Qué hace que la Web 3.0 sea superior a sus predecesoras?
- Sin punto central de control: dado que los intermediarios se eliminan de la ecuación, los datos del usuario ya no serán controlados por ellos. Esto reduce el riesgo de censura por parte de gobiernos o corporaciones y reduce la efectividad de los ataques de Denegación de Servicio (DoS).
- Mayor interconectividad de la información: a medida que se conectan más productos a Internet, los conjuntos de datos más grandes proporcionan algoritmos con más información para analizar. Esto puede ayudarlos a proporcionar información más precisa que se adapte a las necesidades específicas del usuario individual.
- Navegación más eficiente: cuando se usan motores de búsqueda, encontrar el mejor resultado solía ser bastante desafiante. Sin embargo, a lo largo de los años, han mejorado en la búsqueda de resultados semánticamente relevantes basados en el contexto de búsqueda y los metadatos. Esto da como resultado una experiencia de navegación web más conveniente que puede ayudar a cualquiera a encontrar la información exacta que necesita con relativa facilidad.
La Web 2.0 también introdujo sistemas de etiquetado social, pero estos pueden ser manipulados. Con algoritmos más inteligentes, la IA puede filtrar los resultados manipulados. - Publicidad y marketing mejorados: a nadie le gusta ser bombardeado con anuncios en línea. Sin embargo, si los anuncios son relevantes para los intereses y necesidades de uno, podrían ser útiles en lugar de ser una molestia. La Web 3.0 tiene como objetivo mejorar la publicidad aprovechando sistemas de inteligencia artificial más inteligentes y dirigiéndose a audiencias específicas basadas en los datos del consumidor.
- Mejor atención al cliente: cuando se trata de sitios web y aplicaciones web, el servicio al cliente es clave para una experiencia de usuario fluida. Sin embargo, debido a los costos masivos, muchos servicios web que tienen éxito no pueden escalar sus operaciones de servicio al cliente en consecuencia. Mediante el uso de chatbots más inteligentes que pueden hablar con varios clientes simultáneamente, los usuarios pueden disfrutar de una experiencia superior al tratar con agentes de soporte.
En conclusión
La evolución de Internet ha sido un largo viaje y seguramente continuará hacia nuevas iteraciones.
Con la explosión masiva de datos disponibles, los sitios web y las aplicaciones tienen la capacidad de pasar a una web que ofrece una experiencia considerablemente mejor a un número cada vez mayor de usuarios en todo el mundo.
Si bien aún no existe una definición concreta para la Web 3.0, ya está puesta en marcha por las innovaciones en otros campos tecnológicos.